Las piedras de este castillo cuentan con seis siglos de historia en el País Vasco. El rey Luís XI se alojó en el siglo XV y Luís XIV convirtió esta propiedad en un vizcondado en el siglo XVII. Su situación estratégica, muy cerca de San Juan de Luz y de la frontera española, lo convierte en un lugar privilegiado cuya riqueza histórica y exquisita decoración invitan a descubrirlo.